¿Sabes qué son las caries? Se trata de una enfermedad de origen bacteriano que ataca al esmalte dental. Por cierto, ¡se puede prevenir! Y si ya las tienes lo mejor es que las detectes cuanto antes y ¡las frenes!
Hay más personas más propensas que otras a sufrir caries.
Lo único que te puede salvar de tener caries es mantener una buena higiene bucal diaria: cepillarte los dientes, la lengua, las encías, usar hilo dental tras el cepillado, elegir un dentífrico con flúor e ir a las revisiones odontológicas ¡sin saltarse ni una!
Las caries se forman cuando las bacterias normales de nuestra cavidad bucal se juntan con los restos de comida, se forma la placa dental que al acumularse produce las temidas caries. Los alimentos azucarados facilitan la producción de esta infección.
¡Hablemos de alimentación! De alimentos cariogénicos: una dieta rica en carbohidratos fermentables puede ayudar a la aparición de caries. Alimentos como:
*Patatas fritas, pan y galletas saladas. Los hidratos de carbono refinados con almidón que tienen la capacidad de transformarse en azúcares.
*Zumos de frutas concentrados. Tienen un alto contenido en azúcares.
*Bebidas azucaradas. Son muy malas para el esmalte, sobre todo si son ingeridas entre horas. El diente es expuesto a ácido que produce las bacterias.
*Chuches. Cuanto más pegajoso es un alimento más tiempo pasará entre los dientes y será más probable que cause caries.
Pero como nadie es un santo y de vez en cuando hay que pecar, lo mejor será ¡cepillarse muy a menudo y bien y no saltarse ninguna revisión con tu dentista de confianza!
Ven a vernos, ¡la prevención te ahorrará muchos disgustos y alguna caries!