Después de una extracción de una muela del juicio, es importante seguir una dieta suave y nutritiva para facilitar la cicatrización y evitar molestias adicionales. Aquí tienes algunas sugerencias sobre qué comer:
- Alimentos blandos: Opta por alimentos que sean fáciles de masticar y tragar, como puré de papas, sopas cremosas, yogur, helado suave, pudín, compota de manzana sin trozos y huevos revueltos.
- Frutas y verduras suaves: Puedes consumir frutas y verduras siempre y cuando estén bien cocidas o en puré. Algunas opciones incluyen plátanos maduros, manzanas asadas, aguacates, calabaza cocida y zanahorias hervidas.
- Proteínas blandas: Opta por carnes y pescados blandos y bien cocidos, como pollo desmenuzado, pescado al horno, carne molida y tofu.
- Cereales suaves: Puedes disfrutar de alimentos como arroz bien cocido, pasta suave, pan blanco sin costra y avena cocida.
- Evita alimentos difíciles de masticar o que puedan quedarse atrapados en los espacios de la extracción, como nueces, semillas, palomitas de maíz, alimentos pegajosos o crujientes.
- Bebe líquidos: Mantente hidratado bebiendo suficiente agua y evita el uso de pajitas, ya que el vacío puede generar complicaciones después de la extracción.
Es importante seguir las instrucciones específicas de tu dentista o cirujano oral, ya que pueden haber consideraciones adicionales según tu caso individual. Además, evita fumar, beber alcohol y realizar actividades físicas intensas durante los primeros días después de la extracción para facilitar la recuperación. Si tienes alguna preocupación o experimentas dolor o inflamación excesiva, no dudes en comunicarte con tu profesional de la salud.
