En el cuidado de la salud bucal, la clorhexidina se ha convertido en uno de los antisépticos más populares y recomendados por los odontólogos. Pero, ¿realmente sabes qué es, para qué se utiliza y cuándo es conveniente usarla? En este artículo te lo explicamos de manera sencilla.
🔹 ¿Qué es la clorhexidina?
La clorhexidina es un antiséptico bucal que actúa de manera efectiva contra bacterias, hongos y algunos virus. Se presenta en forma de enjuague bucal, gel o spray, y su función principal es reducir la carga bacteriana en la boca para prevenir o tratar infecciones.
🔹 ¿Para qué sirve la clorhexidina?
La clorhexidina es especialmente útil en situaciones donde la higiene oral puede verse comprometida o cuando hay riesgo de infección. Los odontólogos suelen recomendarla en casos como:
- Después de una extracción dental o cirugía bucal, para prevenir infecciones.
- En el tratamiento de gingivitis o periodontitis, ayudando a controlar la inflamación de las encías.
- En pacientes con úlceras o heridas bucales, para favorecer la cicatrización.
- Cuando la persona no puede cepillarse adecuadamente, por ejemplo, tras una intervención o debido a alguna discapacidad temporal.
🔹 ¿Cómo se usa la clorhexidina?
El modo de uso puede variar según la presentación, pero generalmente se recomienda:
- Enjuague bucal: hacer un enjuague con 10–15 ml de clorhexidina al 0,12% o 0,2%, durante 30 segundos, 2 veces al día (mañana y noche).
- No enjuagar con agua después de usarla, para mantener su efecto por más tiempo.
- Evitar comer o beber durante al menos 30 minutos después del enjuague.
- Usar por un tiempo limitado, normalmente entre 1 y 2 semanas, a menos que el odontólogo indique lo contrario.
⚠️ Precauciones y posibles efectos secundarios de la clorhexidina
Aunque es muy eficaz, el uso prolongado de clorhexidina puede causar algunos efectos no deseados, como:
- Manchas temporales en los dientes o la lengua.
- Alteración del gusto (sabor metálico o amargo).
- Sequedad bucal o leve irritación.
Por eso, es fundamental usar la clorhexidina bajo la recomendación de un profesional. La clorhexidina es una gran aliada en el cuidado bucal, especialmente en situaciones donde se necesita un refuerzo antimicrobiano. Sin embargo, su uso debe ser controlado y temporal, siempre guiado por tu dentista de confianza.
