Vamos a elaborar una primera pequeña lista de falsos mitos que giran en torno a la salud bucodental. ¡No creas todo lo que oigas! Primero duda y luego consulta a tu dentista de confianza, es decir, ¡nosotros!
El mal aliento o halitosis es crónico.
La mayoría de casos de halitosis desaparecen con una correcta higiene dental, cepillándose los dientes, encías y lengua después de cada comida, y complementándola con el uso de hilo dental. Y si persiste o te preocupa… ¡ven a vernos!
No debes ir al dentista durante el embarazo.
¡Al contrario! El embarazo conlleva una serie de cambios orgánicos y de conducta que pueden repercutir en la cavidad bucal provocando un mayor riesgo de caries y de enfermedad de las encías. Es importante acudir a tu dentista para hacerte limpiezas bucales y para revisiones.
Las limpiezas dentales arruinan el esmalte.
La limpieza dental es la mejor manera de prevenir las enfermedades periodontales (gingivitis y periodontitis) y evitar la pérdida de dientes, ya que elimina el sarro y la placa bacteriana. Y no daña el esmalte, al contrario, acabas con una sensación de limpieza increíble.
Beber agua no es importante para la salud bucodental.
Beber agua es importante para la salud. Incluída la bucodental. La producción de saliva tiene como objetivo cuidar los dientes y la boca de las bacterias. Es importante beber mucha agua para que las glándulas produzcan más saliva.
¿Habías oído alguna vez estos mitos?
